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Me acuerdo hace varios años cuando estaba construyendo uno de mis emprendimientos, estaba conversando con alguien en una fiesta sobre eso, y me comentó “¡que buena que tengas tu propia Pyme!”.
Por alguna razón, me sentí ofendido, aunque me parezca chistoso hoy en día. Tuve que corregirle que no era una Pyme, sino que era un Startup. Obviamente no tiene nada de malo uno u otro, pero en ese tiempo asociaba la palabra pyme con un local de fotocopias de la esquina.
La mayoría ocupa emprendimiento, startups, pymes, como si fueran todo lo mismo, pero no necesariamente es así.
La clasificación oficial de una pyme (pequeñas y medianas empresas), se basan en cantidad de empleados e ingresos. La clasificación es muy genérica, al igual que startup, que proviene del término en ingles comenzar algo, y se ocupa a una gran cantidad de negocios muy distintos unos de otros.
Pero diferenciarlo uno del otro no es sólo un capricho, tiene sus ventajas, y nos permite comunicarnos mejor al hablar de emprendimiento.
Startups
Una startup tiene muchas definiciones, pero la que más ocupo es que un Startup:
- Identifica un problema
- Diseña una solución innovadora y
- Es capaz de escalar y crecer exponencialmente.
Identificar un Problema
Identificar un problema o necesidad es fundamental para partir un startup, ya que sin esto es imposible innovar. Pero a la vez, es una pieza clave ya que enfoca a una brecha de mercado que no está siendo bien atendida.
El foco en un problema o necesidad de un cliente o usuario es el punto de partida de un startup, ya que permite tener diseñar una solución que de verdad sea útil para el mercado, en vez de dedicarse a hacer lo mismo que hacen todos.
Diseñar una Solución Innovadora
Muchos piensan que innovar es inventar algo nuevo, pero eso es solo una parte. Innovaciones satisfacen brechas de mercado, es decir, requiere que alguien use o compre lo que haces porque lo necesita.
Cuando hablamos de innovación, usualmente puede venir de tres formas:
- Innovación en producto
- Innovación tecnológica
- Innovación en modelo de negocio.
Por ejemplo, el iPod es una innovación en producto. Aquí no hubo un avance tecnológico importante, ya existían reproductores de mp3. Sin embargo, Apple diseñó un producto que estaba hecho para lo que requerían los usuarios y fue un gran éxito.
Un ejemplo de innovación tecnológica es la carne criada en laboratorio, donde no solo es una invención basada en ciencia, sino que también aborda una necesidad importante en el mercado.
Y por último un ejemplo de modelo de negocio, tenemos a Spotify que revolucionó el mundo de la música. Lo tradicional era comprar discos y así escuchar discos enteros en nuestras casas. Mientras que Spotify adoptó un modelo que pasó a llamarse freemium, ya que una gran cantidad de gente puede ocupar el servicio de forma gratuita, mientras que un porcentaje paga el servicio premium que les da el producto con más beneficios.
Capacidad de Escalar
El tercer elemento de un startup, es que tenga potencial de escalar y crecer exponencialmente, es decir, que puede expandirse rápidamente teniendo constantemente nuevos clientes y pueda superar las barreras geográficas. Para ello es clave el componente escalable, es decir, que a medida que se adquieren más clientes, los costos para servir nuevos clientes es marginal en comparación a los costos fijos.
PYMEs
¿Y cómo se diferencia de una pyme?
Muchas empresas nacen resolviendo un problema o necesidad, de hecho, es lo más recomendado para comenzar un negocio. También muchos ocupan tecnología o implementan innovaciones. ¿Pero eso las hace startups? No necesariamente ya que usualmente falta uno o más de los componentes de un startup.
Y no me malentiendas, tener una empresa, aunque no sea un startup, es un tremendo desafío. Tienes que estar atento a las oportunidades y educarte en todo lo que conlleva tener una empresa como finanzas, marketing, gestión, etc. Si tienes un negocio rentable, siéntete con orgullo porque no es fácil.
Y es que he observado que muchos emprendedores quieren tener un startup sin mayor razón. Usualmente se ve como más cool (como mi versión más joven pensaba). Pero tú puedes tener una empresa, que innove, use tecnología y resuelva necesidades, sin necesariamente ser un startup.
La diferencia está en que un startup tiene que encontrar su camino único, y ser capaz de crecer aceleradamente. Eso es una gran cantidad de presión, y con un riesgo gigante. En cambio, un dueño de negocio puede decidir ocupar tecnología o modelos de negocio que ya se han probado que funcionan, y con esto reducen considerablemente su riesgo.
Claro, es probable que no puedan crecer tan rápido, ¿pero es esto tan importante? Tu empresa puede llegar a crecer con el tiempo, puedes ganar una gran cantidad de dinero y puedes eventualmente venderla si es una motivación tuya.
¿Por qué es importante diferenciar un startup de una pyme?
La vara con la que se mide una es muy distinta a la otra. Si buscas levantar capital para expandirte, esto es muy relevante. Un venture capital te va a medir con vara de startup, y si no tienes el crecimiento o la evidencia que muestre tu potencial, tendrás el camino cuesta arriba. En cambio, si vas con un fondo de inversión más tradicional, o un banco, y no muestras el historial de estabilidad y rentabilidad mes a mes, entonces también será difícil obtener financiamiento.
Estos factores permean también en la gestión y estrategia de tu empresa. Si eres un startup, tienes que sacrificar rentabilidad en el corto y mediano plazo porque hay que invertir todo en crecer lo más rápido posible.
En cambio, una pyme se puede dar el lujo en estabilizar y sistematizar procesos, reduciendo costos para mejorar su rentabilidad en el mediano plazo.
Por eso plantéate, si vas a emprender o ya tienes una empresa, ¿quieres un startup o una pyme? A partir de eso organiza tus metas y procesos, porque la forma que mides el desempeño y la estrategia de crecimiento depende de esa definición.
Sino corres riesgo de fracasar tempranamente porque vas a estar entre ser una pyme y ser un startup.
Cuando estés listo(a), hay otras 3 formas en las que puedo ayudarte:
- Programa de asesoría para aumentar tus ventas: En 8 sesiones te daré herramientas y asesoría para mejorar tu estrategia y gestión comercial.
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