Diferenciar entre tácticas y estrategias es clave para nuestra vida personal y profesional. Internet está lleno de gente que te vende la última táctica que debes probar. Una nueva aplicación, práctica, dieta, marketplace, red social, truco, tendencia. Todos los días nos vemos bombardeados de información sobre nuevas cosas que debemos hacer o intentar.
“¡Prueba esta nueva dieta del lagarto! ¡Bajarás 30 kg en dos días!”
“¡Hazte millonaria bailando en TikTok!”
“¡Olvídate de dating apps, lo nuevo para conocer chicas y chicos es el snaking!”
Y muchas, muchas más. Las anteriores son una exageración (o quizás no), y la realidad es que no hay nada de malo en intentar una u otra de estas tácticas. Tácticas, en este artículo, son acciones concretas para lograr algún objetivo como los ejemplos anteriores. Es probable que incluso funcionen bien, quizás no para todo el mundo pero sin duda las tácticas le sirve a un grupo de personas.
El problema está cuando saltas de táctica en táctica, siempre intentando lo nuevo que está de moda para lograr las cosas que quieres. Gastas una gran cantidad de tiempo aprendiendo y aplicando algo que es efímero, porque la verdad es que las tácticas van cambiando constantemente. Lo que era tendencia hace un par de años, ahora pocos ocupan o dejó de servir. Y lo que ahora es estándar, probablemente no sea popular en un par de años.
Por ejemplo ¿se acuerdan que hace unos años todos ocupaban Facebook para crear eventos? Parecía que todos los días te invitaban a un cumpleaños o panorama. Muchas personas que no ocupaban la red social se vieron obligados a usarla para no sentirse aislado del resto. Pero con el tiempo esa función de Facebook se ha ido ocupando cada vez menos, reemplazado por otros medios.
Entonces, si aplicar la táctica popular del momento no es lo ideal. ¿Cuál es la alternativa?
Enfócate en aprender y aplicar estrategias en vez de tácticas
Las estrategias son direcciones generales para lograr un objetivo. Una estrategia actúa a un nivel más alto que las tácticas ya que no se enfoca en una acción o herramienta en específico, si no que entrega una guía de cómo actuar. Una buena estrategia te servirá siempre ya que no pasan de moda; es conocimiento o sabiduría que ha sido probada por muchos años, por lo que es difícil que se acabe su utilidad.
En inversiones táctica es “cámbiate del fondo E al A”. Estrategia es “compra barato y mantén a largo plazo”.
En empresas táctica es “dictar un curso de comunicación efectiva”. Estrategia es “siempre entrena a tu gente”.
En marketing táctica es “regala un pdf a tus prospectos”. Estrategia es “siempre entrega mayor valor del que capturas”.
A partir de las estrategias puedes derivar tácticas concretas a aplicar, pero entender la dirección general te permite distinguir cuando una táctica es efectiva -al ser congruente con tu estrategia- y cuando una táctica es solo maíz inflado. Yo ocupo la táctica de entregar pdf a gente interesada ya que se entrega valor, pero no estoy bombardeando con publicidad -que es una táctica que se ocupa comunmente- porque no es congruente con la estrategia de marketing que mencioné antes.
Por ejemplo, a mi que me gusta el marketing observo a cientos de personas que hablan todos los días sobre cómo hacer Facebook ads, SEO, infografías, vlogs, TikTok, y un montón de otras cosas. Pero veo muy pocos hablando sobre las estrategias que causan el mayor impacto. Cómo crear el mayor valor a tus prospectos y clientes. Cómo crear, comunicar y mantener una comunidad de personas que les interesa lo que tienes para ofrecer.
1000 True Fans, uno de los artículos más influyentes en emprendimiento y marketing de nuestra época fue escrito por Kevin Kelly hace 12 años. El artículo habla sobre cómo si logras fidelizar una comunidad con mil personas que les guste tanto el valor que entregas que están dispuestos a pagar por ello siempre, puedes ganarte la vida de esta forma. No habla de cómo tienes que tener un Patreon para juntar fans, o un Instagram con miles de seguidores. Kelly habla de estrategias alrededor del concepto de mil fans verdaderos, y esto seguirá siendo valido por muchos años más.
Tienes que estar siempre buscando y aprendiendo estrategias que perduren en el tiempo. Domina los grandes principios de vida, carrera y negocios. Las enseñanzas perennes que se pueden aplicar una y otra vez.
No conozco muchas estrategias pero siempre estoy aprendiendo y probando nuevas. Las pocas que validé y uso, confío que funcionarán por buena parte de mi vida.
Las tácticas cambian, estrategias perduran.